¿Alguna vez has actuado de una forma que no se corresponde con lo que piensas? Seguro que el resultado te generó malestar o incomodidad. Esta respuesta es completamente natural y se denomina disonancia cognitiva. Sin embargo, esta respuesta puede ser problemática si se convierte en autoengaño. Te explico porqué.

¿Qué es la disonancia cognitiva?

La disonancia cognitiva es la respuesta psicológica en forma de malestar o tensión que se genera cuando se da una incoherencia entre nuestras creencias, actitudes o actos. Es decir, cuando dos ideas, sentimientos o actitudes son incompatibles o contradictorios entre sí, podemos sufrir nerviosismo o ansiedad. Por ejemplo, los fumadores son conscientes de los perjuicios de fumar, pero su adicción hace que sus actos entren en disonancia cognitiva con la información que tienen al respecto: «debo cuidar mi salud», «el tabaco es muy perjudicial».

Como respuesta, tendemos a la reducir las contradicciones de esta disonancia. Para crear coherencia, podemos adoptar nuevas ideas en forma de excusas, considerando nuevos detalles o ventajas en la idea o actitud que nos ha llevado a la disonancia. Estos son algunos ejemplo de disonancia cognitiva ante un

  • Negación de la contradicción: «¿Fumar mata? Pues de algo hay que morirse».
  • Cambiar el hecho que causa la disonancia: «Dejaré de fumar».
  • Justificación aportando condiciones: «Fumaré, pero solo los fines de semana».
  • Justificación con nuevos comportamientos que palian la causa de disonancia: «Fumaré, pero haré más ejercicio y cuidaré mi dieta».

Autoengaño: un paso más en la disonancia cognitiva

La disonancia cognitiva es una respuesta psicológica natural estudiada por Leon Festinger, que incluso la considera innata. Sin embargo, si no la gestionamos correctamente puede derivar en el autoengaño. Ante la disonancia cognitiva, nuestra respuesta es evitar el sentimiento de ansiedad o malestar, lo que en ocasiones nos puede llevar a engañarnos a nosotros mismos.

El autoengaño es la negación de la importancia de los argumentos que son opuestos a los nuestros. Se trata de una adaptación psicológica que evita el malestar que produce la negación de las creencias o actos propios. Esta respuesta se basa en la necesidad de aprobación y reconocimiento. El autoengaño puede ser…

  • funcional: nos convencemos a nosotros mismos de que algo falso es correcto.
  • consolatorio: culpamos a un agente externo de nuestros propios fracasos para mejorar nuestro ego.

A largo plazo, el autoengaño es muy dañino. Por un lado, no nos permite desarrollarnos y desafiarnos a nosotros mismos. Por otro lado, esconde nuestras responsabilidad y echa balones fuera.

¿Cómo responder ante la disonancia cognitiva sin caer en el autoengaño?

Cuando nuestros pensamientos, sentimientos o actos están en disonancia, debemos ponerle remedio y tomar medidas. La estrategia debe centrarse en cambiar el comportamiento que nos hace sentir malestar. Cuando nos deshacemos de las excusas, tenemos la fuerza para cambiar aquello que nos afecta tanto.

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