En los casos de adopción y acogida, es algo normal que en algún momento el adoptado quiera conocer a la familia biológica. Cuando este momento llega, es fácil que se generen conflictos en la familia y también en el reencuentro de la persona adoptada; sobre todo si las personas no se conocen o no se recuerdan a pesar de compartir genes.
Una forma adecuada de resolver conflictos entre las dos partes implicadas es la mediación familiar en los casos de adopción o acogida. Frente a esta situación, el mediador es el encargado de tomar las decisiones a través de un acuerdo entre las partes y también de facilitar la comunicación para poder alcanzar ese acuerdo.
Las funciones de un mediador consisten en acompañar a la persona adoptada que busca a sus familiares y después a la persona o familia encontrada con el objetivo de completar la historia familiar de un adoptado, su identidad y averiguar su descendencia.
La mediación familiar en búsqueda de orígenes destaca por ser flexible, voluntaria y confidencial. El adoptado y el mediador son los que deciden comenzar o terminar un proceso de mediación, garantizando la confidencialidad del caso, que es una característica fundamental que suele ser la clave del proceso. Con la mediación se pretende encontrar el equilibrio entre los derechos del buscado (que tiene derecho a la intimidad) y del buscador (que tiene derecho a saber).
Fases
Este proceso consta de varias fases que dependerán de lo que se pretende conseguir o soportar:
- Preparación de la persona adoptada: expectativas, motivaciones.
- Contacto del mediador con la familia de origen para intercambiar información.
- Preparación del encuentro entre el adoptado y la familia de origen si ambas partes están de acuerdo.
Casos
La mediación familiar en los casos de adopción se lleva a cabo en:
– Situaciones de separación y divorcio con hijos adoptados.
– Familias con problemas o conflictos relacionados con los orígenes o la adolescencia del adoptado.
– Familia mixtas con hijos biológicos y adoptados.
– Familia adoptivas que intentan establecer un contacto con la familia de origen.
– Búsqueda de orígenes del adulto adoptado.
La mediación familiar es la mejor alternativa extrajudicial para resolver problemas en muchas situaciones y cada vez se aplica más a otras dimensiones. Hay que tener en cuenta que, durante este proceso, entran en juego numerosas cuestiones en las que los implicados necesitarán apoyo. Si estás interesado en saber más sobre este tema, no dudes en ponerte en contacto con nuestros mediadores familiares en Valladolid. Te resolveremos todas tus dudas sin ningún compromiso.
Desde Centro Psicológico Parquesol podemos ayudarte a través de nuestro servicio de mediación familiar con el fin acabar con los conflictos que se puedan generar en los casos de adopción y acogida y buscar la mejor solución para todas las partes.
Deja tu comentario